Pablo Juanjo Roger Llovet ESCENA 1 (Escenario con las cortinas corridas. Donato -siempre con una mochila en la espalda- hace su entrada por un lateral y las descorre sigilosamente. Y el que es vencido hoy, ser vencedor mañana.
Porque en haciéndote conde, cátate ahí caballero, y digan lo que dijeren; que a buena fe que te han de llamar señoría, mal que les pese. Y puesto que el principal intento de semejantes libros sea el deleitar 45, no sé yo cómo pueden conseguirle, yendo llenos de tantos y tan desaforados disparates: que el deleite que en el alma se concibe ha de ser de la hermosura y concordancia que vee o contempla en las cosas que la vista o la imaginación le ponen delante, y toda cosa que tiene en sí fealdad y descompostura no nos puede ... Y si se me hace cargo que eran honestos sus pensamientos 62 y que por esto estaba obligada a corresponder a ellos, digo que cuando en ese mismo lugar donde ahora se cava su sepultura me descubrió la bondad de su intención, le dije yo que la mía era vivir en perpetua soledad y de que sola la tierra gozase el fruto de mi recogimiento y los despojos de mi hermosura; y si él, con todo este ... Y una frase me hizo recordar —un poco— lo que vemos en este parlamento", comenzó diciendo el delegado. Enseguida concluyó: "Ese momento tan especial, cuando el ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha le dice a su escudero Sancho: 'Sancho, dejad que los perros ladren, es señal de que cabalgamos'.