Tenemos que irnos a un tiempo bastante atrás si queremos informarnos acerca del consumo de este alimento directamente en nuestra mesa, ya que desde hace muchos podemos ver cómo los hombres se han alimentado de las glorias del mar de dónde la sardina, era una de las más fáciles de encontrar. Construido en Lekeitio, el atunero Agurtza es un ejemplo significativo de estos antiguos barcos de madera y todo un tesoro de nuestro patrimonio. La sardina, el verdel, los chicharros y las anchoas compartieron espacio con el atún en las entrañas de esta nave. La Sardina sin raspa que quiere salvar el mar ...
... como las sardinas, deben formar parte de nuestro fondo de armario culinario. Un cofre con oro, joyas y otros objetos valorados en US$1 millón fue descubierto en las Montañas Rocosas de Estados Unidos.